Punción seca:

Técnica realizada con agujas de acupuntura para el tratamiento del Síndrome de Dolor Miofascial causado por la aparición de puntos gatillo miofasciales (PGM). Los PGM son nódulos hiperirritables dentro de una banda tensa del músculo que si se encuentran activos pueden crear un dolor local, dolor referido, disminución de la fuerza, restricción de movilidad, pérdida de control motor,…

Terapia craneal:

Técnica manual sutil con la que conseguimos liberar las zonas de hipomovilidad y restricción en las suturas del cráneo. Todos los huesos del cráneo tienen su propio movimiento y éste, debido a traumatismos, golpes, accidentes o estrés, se puede ver limitado o restringido. Con la devolución de la movilidad se mejora la función y permite que el líquido cefalorraquídeo (LCR) y el resto de circulaciones se muevan libremente. Esta terapia está indicada para cefaleas, aturdimiento, vértigos, sinusitis, problemas oculares y de oído, cansancio…

Estiramientos musculares y miotendinosos:

Con estas técnicas buscamos un alargamiento del músculo llegando a una mayor longitud que la que tiene en reposo con el fin de mejorar la elasticidad del tejido conjuntivo. Pueden ser realizados por el fisioterapeuta como parte del tratamiento de contracturas o acortamientos por inmovilización, o como una práctica por parte del paciente mediante una tabla específica para recuperar tras la actividad deportiva, evitar lesiones o mejorar la postura.

Vendaje funcional (terapéutico y preventivo):

Es un tipo de inmovilización parcial, que se caracteriza por permitir una cierta movilidad funcional frente a las inmovilizaciones totales. Se utiliza en patologías ligamentosas, tendinosas y musculares.

Movilización del sistema neuro-meningeo o neurodinamia:

Es una técnica de movilización manual cuyo objetivo es realizar movilización del sistema nervioso periférico, lo cual es útil para aliviar, incluso eliminar, algunos tipos de dolores que tienen su origen en alteraciones o problemas que implican al nervio periférico.

Diatermia:

Permite depositar energía en profundidad sin alterar los tejidos en superficie. Actualmente se han conseguido grandes resultados en la las lesiones musculares y en la regeneración muscular incluidos los deportistas de élite. Gracias a su efecto termogenético en tejidos profundos nos facilita el trabajo posterior con terapia manual.

Técnicas de liberación miofascial o inducción miofascial:

Es una terapia dirigida a mejorar las disfunciones y restricciones que se producen a nivel de las fascias del cuerpo, e indirectamente al resto del aparato locomotor, estructuras y vísceras. Estas disfunciones pueden causar dolor, falta de movilidad y limitaciones funcionales.
La eliminación de las restricciones permite reestablecer el equilibrio corporal, eliminar los síntomas dolorosos y recuperar la función del aparato locomotor.

Técnicas específicas para pediatría (Concepto Bobath, Le Métayer):

La reeducación cerebromotriz del niño pequeño según M. Le Métayer, se basa en los niveles de evolución motriz innatos en un niño sin discapacidad. Se tratan las dificultades motrices del niño o niña en función del grado de su patología, estimulando y enseñando al niño el control voluntario a través de ejercicios, aplicados mediante unas técnicas muy precisas. A través de la terapia se busca paliar las secuelas que provoca la discapacidad sobre el movimiento y el funcionamiento global de su cuerpo.

Vendaje Neuromuscular:

Consiste en la aplicación de cintas adhesivas elásticas especiales sobre la zona afectada con el objetivo de no limitar el movimiento y eliminar dolores o problemas musculares. Hay muchos beneficios del vendaje neuromuscular, uno de ellos es corregir el alineamiento de los músculos débiles así como facilitar el movimiento de la articulación como resultado de las cualidades de tracción de la venda.
Además, levanta la piel, aumentando el espacio bajo ella y aumentando el flujo de sangre y la circulación de fluidos linfáticos, esto alivia la presión sobre los receptores que detectan el dolor.

Terapia cráneo-sacral:

El sistema cráneo-sacro está formado por las meninges, huesos en los que se insertan (cráneo y sacro) y el líquido cefalorraquídeo. La terapia se realiza con un leve contacto de la mano del terapeuta percibiendo el movimiento cráneo-sacral, transmitido a través del sistema fascial, que ha podido quedar alterado por traumatismos, enfermedades o factores emocionales. El cuerpo responde al tratamiento poniendo en funcionamiento su capacidad de autocuración, liberando por tanto las restricciones y mejorando la salud.

Magnetoterapia:

Tras una fractura o fisura es la técnica de elección para acelerar el proceso de regeneración ósea. Es muy útil también en múltiples patologías del sistema nervioso, circulatorio, aparato locomotor e incluso en patologías de la piel…Sus efectos regeneradores unidos a su alta tasa de penetración en el cuerpo humano, hacen del magnetismo terapéutico un tratamiento de elección que además de ser fácil de aplicar, nos ayude eficazmente frente a procesos inflamatorios.

Técnicas manipulativas:

Son técnicas manuales realizadas por el fisioterapeuta de corta amplitud y alta velocidad que nos sirven para dar movimiento a estructuras que se encuentran bloqueadas en un determinado sentido del movimiento mejorando la biomecánica de la articulación. Realizadas sobre la columna vertebral tienen el efecto reflejo sobre el conjunto de la metámera correspondiente, actuando sobre el miotoma (músculo), esclerotoma (hueso), viscerotoma (órgano), dermatoma (piel) y angiotoma (circulación) que está inervado por ese nivel medular y sobre el sistema ortosimpático y parasimpático. Consiguen pues, establecer la relación entre la estructura (columna vertebral) y la función de los distintos elementos corporales.

Ergonomía y hábitos e higiene postural. Recomendaciones sobre economía articular.

Consejos para la aplicación en el día a día, ya sea en el trabajo o en la realización de determinadas actividades o deportes, para una adaptación óptima a las condiciones del entorno con la adopción de patrones posturales correctos, eliminando los malos hábitos, con el fin de evitar futuras lesiones y mejorar la calidad de vida.

Parafina:

Gracias a su alta conductibilidad térmica se utiliza como agente terapéutico y calmante del dolor en procesos reumatológicos, artríticos, contracturas y rigideces, sobre todo en las articulaciones de las manos. Consiste en sumergir la zona a tratar en un recipiente con la sustancia líquida que, a temperatura ambiente, quedará formando capas y, tras envolver la zona, se mantendrá unos minutos dejándola actuar.

Masoterapia:

Consiste en el uso del masaje con fines terapéuticos mediante distintas técnicas elegidas en función de la lesión a tratar y el efecto que queramos conseguir. Los beneficios de esta terapia son muy diversos: disminución del tono muscular en contracturas y zonas de tensión, oxigenación de tejidos, facilitación de la eliminación de toxinas, disminución del estrés y de la hormona cortisol, liberación de endorfinas (mejora del dolor), estimulación de la circulación, aumento de la elasticidad de la piel…

Drenaje linfático:

Consiste en un conjunto de maniobras específicas y suaves que se realizan con el objetivo de activar la circulación linfática y mejorar su función de drenaje, inmunitaria y depurativa. Este tratamiento está especialmente indicado en la prevención de linfedemas tras la extirpación de ganglios, disminución de edemas postraumáticos y post-quirúrgicos y retención de líquidos.

Electroterapia: corrientes de baja y media frecuencia, ultrasonidos:

La electroterapia consiste en la aplicación de corrientes eléctricas con fines terapéuticos. Dependiendo de la modalidad utilizada (TENs, Diadinámicas, Interferenciales, Ultrasonidos…) se utilizan por su efecto analgésico, antiinflamatorio, descontracturante o para activación muscular.

Cinesiterapia:

Conjunto de procedimientos que tienen como elemento principal el movimiento realizado de forma pasiva o activo- asistida con ayuda del fisioterapeuta, o de forma activa por parte del paciente, ya sea o no frente a una resistencia, con el fin de mantener o mejorar la amplitud articular, aumentar la fuerza muscular, mantener el sistema propioceptivo, disminuir el dolor…

Masaje Fricción Transversal de Cyriax:

Tratamiento por movilización en el lugar exacto de la lesión (fibras musculares, tendinosas o ligamentosas) o sobre las secuelas de ésta (adherencias, cicatrices, bridas), alcanzando estructuras profundas. Se aplica mediante una movilización por fricción de forma transversa a la estructura lesionada.

Pilates:

El Pilates es un programa de ejercicios físicos diseñados por Joseph Pilates para estirar, fortalecer y equilibrar el cuerpo. Este método influye sobre el dolor lumbar crónico y funcionalidad, calidad de vida, equilibrio-fuerza, composición corporal, calidad del sueño, flexibilidad, elasticidad, tono muscular etc. Estos ejercicios se adaptan al nivel y las necesidades de cada uno. Nuestras clases son grupales, pero de no más de 7 personas para poder corregir todos los ejercicios a todos. Aunque todos hacen los mismos ejercicios cada persona tiene sus adaptaciones específicas para poder realizarlos acorde con su cuerpo y evitando el dolor.

Terapia visceral:

Terapia manual con la que se reequilibra el movimiento propio de cada víscera para recuperar su función y evitar la perturbación y alteración en el organismo y su influencia sobre el sistema musculo-esquelético. Indicada para trastornos digestivos, respiratorios, circulatorios, uro-ginecológicos, endocrinos y dolores referidos viscerales (lumbalgias, cervicalgias, omalgias…).

Técnicas específicas neuromusculares según Método Kabat, Bobath:

Tratamiento y abordaje de las diferentes patologías neurológicas con técnicas y maniobras según los diferentes Métodos y/o Conceptos específicos neuromusculares.

Termoterapia superficial:

Consiste en la aplicación de calor mediante diferentes herramientas (hot-pack, infrarrojos…) sobre el organismo con fines terapéuticos.

Crioterapia:

Consiste en la aplicación de diferentes procedimientos que utilizan el efecto del frío como agente terapéutico (cold-pack, masaje con hielo o criomasaje…)

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